Después de lamentar la falta de tiempo para inculcar sus ideas en el inicio de temporada y ensayar acciones de estrategia, por el parón que sufre la Liga tras la primera jornada, Mourinho desveló que la solución que adoptará desde el próximo martes a las 17.00 horas, ante las numerosas ausencias que tendrá, será subir en bloque al Castilla.
Tan solo los porteros Jerzy Dudek y Antonio Adán, más los jugadores de campo Esteban Granero, Royston Drenthe y Pedro León, estarán a las órdenes de Mourinho en los próximos diez días. "Se van todos, se quedan cuatro jugadores, dos de ellos porteros y los lesionados", afirmó sin incluir a Drenthe, del que espera su salida del Real Madrid en las próximas horas: "Los voy a juntar con el Castilla y los voy a integrar en un grupo de trabajo. Es positivo para los chicos porque es motivador tener diez días cerca al entrenador del primer equipo. Vamos a trabajar así, no tenemos otro modo", desveló.
Bromas sobre el asunto
Mourinho bromeó con otra posibilidad que sería jugar partidos entre jugadores y cuerpo técnico. "Si no haríamos partidos pequeños de cuatro contra cuatro de entrenadores contra jugadores. Ellos pierden y se quedan mal psicológicamente".
La realidad es que el Real Madrid no tendrá más que un día con todos sus jugadores para preparar el encuentro de la segunda jornada liguera, que le enfrenta a Osasuna en el estadio Santiago Bernabéu. "Le pasa a todos los grandes, los que tenemos muchos jugadores en las selecciones viven exactamente lo mismo. Luego llegas ante Osasuna que en 15 días ha trabajado sólo por este partido", sentenció.
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