Hombres como Özil o Di María, hasta el momento intocables para el técnico merengue, han comenzado a tener una competencia real en el ex del Milán, que está respondiendo a la confianza del club con un gran fútbol. Ante el Ajax, el brasileño volvió a participar activamente en el ataque merengue, siendo partícipe de la jugada del primer gol, materializando el segundo con un gran chut desde el borde del área y asistiendo a Benzema en el tercero.
Poco a poco, Kaká comienza a recordar a aquel futbolista rápido y desequilibrante que hizo las delicias de San Siro durante seis felices temporadas. Pero, lo que es mejor, se ha convertido en uno de los hombres más activos del equipo. Y es que, con continuidad, un hombre como el brasileño puede convertirse en un pilar básico para este Real Madrid. Hoy lo ha vuelto a demostrar ante el Ajax, complementándose perfectamente con Özil y enseñando en el Bernabéu todo su potencial. Parece que día a día se confirma: el mejor Kaká ya ha vuelto.
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