El Real Madrid sin comerlo ni beberlo podría perder a Ángel Di María para la práctica del fútbol por un tiempo indeterminado, o eso es lo que se informa desde el país natal del futbolista. El extremo, criado en las categorías inferiores de Rosario Central, ciudad que le vio nacer hace veintitres años, dio el gran salto a Europa en el verano de 2007, cuando el Benfica pagó por sus servicios 3 millones de euros, para tres años más tarde acabar en el Real Madrid a razón de 25 millones.
En el acuerdo que firmo Rosario Central con el Benfica, se incluía una cláusula que señalaba que el club portugués debería abonar a la entidad argentina un 20% de un posible futuro traspaso de su joven baluarte, algo que hasta la fecha no han cumplido los lisboetas y por el que Di María podría acabar inhabilitado.
El club argentino reclama cuanto antes esa cantidad de dinero, que correspondería a algo más de seis millones de euros, para no emprender acciones legales contra los portugueses y que implicarían directamente al jugador. De esta manera, Rosario Central ya ha puesto en conocimiento del Real Madrid y de la Bolsa de Valores de Lisboa el tema, además de instar al club blanco a no pagar cualquier tipo de cantidad de adeude con el Benfica hasta que no se solventen estos problemas.
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