Ni el brasileño ni el salmantino se han ejercitado en los últimos días y han terminado cayéndose de la convocatoria de Mourinho, al igual que un Marcelo que ha terminado quedando fuera por una contusión en el cuádriceps. De esta forma, Sergio Ramos se perfila como lateral en Gerland, dejando un hueco en el eje de la zaga para la entrada de Albiol o Varane, previsiblemente el primero, con mucha más experiencia en partidos de alto nivel. En la izquierda, Coentrao cubrirá la baja de Marcelo.
Otra de las opciones que tiene Mourinho sería colocar a Lass en el lateral derecho, una probatura que tendría como fin mantener la solidez del equipo en el centro de la defensa, donde Sergio Ramos se está erigiendo en el auténtico mariscal de campo del Real Madrid. No obstante, parece poco probable que el luso apueste por situar al galo en el carril diestro.
Por otro lado, la salida de Kaká deja vía libre a Mesut Özil en la mediapunta, tras encadenar varios partidos alternando con el brasileño. Benzema regresará a la delantera en un escenario que conoce a la perfección y que se le da muy bien, tal y como demostró con el tanto obtenido la pasada temporada. La duda más razonable se plantea en el centro del campo, donde Mourinho deberá decidir entre Khedira y Lass, aunque la suplencia del alemán en Anoeta le da más opciones de entrar en el once.
De esta forma, el Real Madrid podría formar en Gerland con Iker Casillas bajo los palos, Sergio Ramos y Marcelo en los laterales, con Pepe y Albiol y en el eje de la zaga. Doble pivote para el intocable Xabi Alonso y Sami Khedira, mediapunta para Mesut Özil, Di María y Cristiano en los costados y Karim Benzema en punta de ataque. Un once de garantías que espera acabar definitivamente con la maldición del Olympique en Gerland.
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