Sabedor de que hoy el Santiago Bernabéu también juega su particular partido ante el Barcelona, el portavoz de José Mourinho, Eladio Paramés, ha afirmado vía twitter que tiene un deseo para el partido de esta noche: “Ver el Bernabéu transformado en un infierno”, ha afirmado una de las personas de confianza del técnico madridista.
El colorido en el estadio está asegurado. No en vano, en cada asiento del feudo blanco se colocará una bandera blanca con el escudo del Real Madrid para dar mayor sensación de ambiente en el feudo merengue. Una vez arranque el encuentro, serán las gargantas de los 80.000 espectadores que abarroten Chamartín los que tengan que meterle presión al Barcelona y apoyen a los de Mourinho: ¡¡HASTA EL FINAL, VAMOS REAL!!
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