Se espera alrededor de 1000 aficionados rusos en las gradas de Chamartín para acompañar a su equipo en el intento de dar la sorpresa ante el equipo blanco. A pesar de haber sido declarado de alto riesgo, lo cierto es que no hay demasiada expectación de cara al partido.
Aún quedan casi 14000 entradas en taquilla y el público madridista no parece muy dispuesto a acudir al encuentro. Los precios de las entradas oscilan entre los 70 euros y los 220 euros y se espera que en los dos próximos días haya un tirón de última hora.
El Real Madrid afronta el partido con la máxima concentración y tensión para evitar sustos inesperados. De pasar la eliminatoria, el conjunto madridista entrará en el sorteo de los cuartos de final que se celebrará el próximo viernes en Nyon.
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