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El cancerbero blanco es una leyenda viva no sólo del Real Madrid, sino del fútbol español. Como capitán del Real Madrid ha levantado una Copa del Rey, este año la Liga y como líder de la 'Roja' ha levantado tanto una Eurocopa como una Copa del Mundo, el título más importante de la historia del deporte nacional. Y con un protagonismo fuera de toda duda, ya que siempre apareció en momentos puntuales para hacer la parada de la noche, salvar al Madrid o a la Selección y dar un aliento a sus compañeros. Lo hizo en 2002 cuando sustituyó a César en Glasgow, lo hizo en el Ernst Happel cuando detuvo dos penaltis a Italia en una tanda para la historia o cuando salvó aquel mano a mano ante Robben en la final del Mundial de Sudáfrica. Grandes ejemplos de la enorme trayectoria de Iker.
Los grandes momentos de Casillas bajo los palos de una portería pesan en la memoria de cualquier buen aficionado al fútbol, no sólo al Real Madrid. Por este motivo, hoy es día de brindar un nuevo homenaje al auténtico líder del club blanco y de la 'Roja', a un hombre que aparte de sus éxitos en los terrenos de juego ha triunfado en la vida demostrando que se puede ser una persona normal siendo un héroe para millones de aficionados. Un galáctico de Móstoles que ha hecho vibrar con sus paradas a los amantes de este deporte y que tiene entre cejas un último 'regalo' para sus seguidores: la Décima.
Casillas no pudo llevar a la final de Múnich al Real Madrid en este 2012 a pesar de que llegó a detener dos penaltis en la fatídica tanda del Bernabéu, los mismos que Neuer. Los blancos jamás estuvieron tan cerca de la Décima como este año, pero finalmente no pudo ser. No obstante, Iker seguirá erre que erre. Jamás ha cesado en su empeño por mantenerse en lo más alto, y en la celebración de la Liga prometió que cumpliría el sueño de madridismo en una imagen para la historia. A la espera de ello, sólo nos queda agradecerle su entrega por este escudo y desearle una vez más lo mejor. ¡FELICIDADES CAPITÁN!
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