El 1 de mayo de 1985, el Real Madrid anotaba 52 puntos contra Ron Negrita Joventut en una exhibición portentosa, pero lo ocurrido ayer ante el Barcelona ha superado todas las expectativas. El juego y el acierto madridista recordó a los mejores momentos del equipo de Laso de hace dos temporadas o de la pasada campaña cuando el Madrid fue capaz de ganar los cuatro títulos en disputa.
El ‘doblete’ está más cerca pero en el vestuario no hay ni mucho menos euforia. La ‘caseta’ tiene muy presente lo que sucedió hace cuatro temporadas. En el tercer choque, el Madrid apullaba al Barça, se ponía 1-2 en la eliminatoria pero el Barça lograba vencer en el cuarto para decidir finalmente la Liga a su favor en el Palau Blaugrana.
Si el ritmo anotador es parecido al del lunes, la victoria estará mucho más cerca. Sergio Llull, Rudy Fernández, Gustavo Ayón y Sergio Rodríguez están inspirados y ven el aro como una piscina. Sin duda, las sensaciones son magníficas. Ganar la Liga este miércoles no parece una quimera pero el Madrid no debe fiarse de un Barcelona que llegará ‘herido’ al choque.
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