Una de las exigencias del club esta temporada es controlar el gasto y tras rascarse el bolsillo para fichar a Carlos Súarez justo antes de empezar la competición, ahora sólo busca jugadores interesantes que estén libres.
El máximo taponador de la Euroliga, Mirza Begic (25 años, 2.20 m.) es un caramelito a estas alturas, aunque si quiere jugar en el Real Madrid necesita arreglar primero su conflicto con el Zalgiris Kaunas.
Hace justo una semana, el representante del pívot mandó un fax a las oficinas del club lituano para comunicar que hacía valer una cláusula del contrato: no habían pagado la comisión en tiempo y forma, por lo que el jugador era libre.
El Zalgiris lo negó. Acusó de "juego sucio" a los representantes del esloveno, aunque también reconocieron que se van haciendo a la idea de que lo pueden perder...
Begic ratificó luego a sus agentes; no entrena desde entonces con su ex equipo y a partir del 11 de enero, la comisión disciplinaria de la FIBA, a la vuelva de vacaciones, dará la razón a una u otra parte.
Si es al jugador, poco podrán hacer los demás para competir con el Real Madrid por lo que significa; si sale victorioso el Zalgiris, puede que Begic sea sancionado con varios meses sin jugar.
Mirza Begic nació en Bosnia-Herzegovina, pero se marchó a Eslovenia siendo júnior, y por eso juega con pasaporte de ese país.
Como a muchos otros pívots, le costó explotar. Este temporada, segunda en Lituania, promedia 10 puntos (56,7% en tiros de campo), 5 rebotes y ¡2,3 tapones!, líder en ese apartado de toda la Euroliga, por delante del que podría ser su compañero de equipo, el madridista D'or Fischer (2 tapones).
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