Doce minutos de puro fútbol

El Castilla finiquitó el partido en los primeros compases con dos goles de Joselu y otro de Mosquera





El choque comenzó con una intensidad inusitada por parte de los hombres de Alberto Toril. Al ataque desde el saque inicial, la apuesta por el fútbol ofensivo fue premiada con un gol a los tres minutos de juego, conseguido por Joselu con un acrobático remate de cabeza tras un centro de Juanfran desde la derecha. El golpe fue muy duro para el Lugo, que se vino abajo. El Madrid olió la sangre y decidió que era el momento de poner el broche final al partido a pesar de que sólo se llevaban unos minutos de juego.

Sería el propio Joselu quien lograría el 0-2 en un lanzamiento de falta directa que se clavó por el palo del portero. El potente chut, raso y ajustado, entró pegado a la madera sin que Escalona pudiera hacer nada para atajarlo. El partido estaba cada vez más decantado del lado madridista, pero por si fuera poco, el guardameta local regalaría a Mosquera el 0-3 con una mala cesión a un compañero. Sólo habían pasado doce minutos de juego, doce minutos en los que el Madrid destapó el tarro de las esencias de su buen fútbol. A los tres goles les acompañaron otras tantas ocasiones claras que de haber entrado habrían significado una goleada aún más escandalosa.

Pero el Castilla levantó el pie del acelerador. Poco a poco, el Lugo se fue deshaciendo de la presión visitante e intentó acortar distancias. Los gallegos comenzaron a creer en sus posibilidades a medida que los blancos daban el partido por ganado, y encontrarían su premio en el gol de Fran Pérez pasada la media hora de juego. No sería más que un espejismo, ya que al filo del descanso Juanfran volvía a poner las cosas en su sitio. El guión de la película no varió durante la segunda mitad, y el Lugo tuvo pocas opciones de volver a meterse en el partido.

Al contrario, ya que Joselu volvería a marcar a falta de quince minutos para el final del encuentro para completar su hat trick y la goleada más abultada del Castilla esta temporada a domicilio. Centro de Casado y remate en el segundo palo del delantero gallego. El ascenso está más cerca, más aún teniendo en cuenta que el Tenerife perdió en Vigo ante el Celta B y que la próxima jornada los canarios se medirán al Lugo en un duelo fraticida. La primera posición está a la vuelta de la esquina, y sólo la lesión de Carvajal, que se torció el tobillo en una carrera por la banda, empaña la felicidad del mejor Castilla de los últimos años.