¿En qué se parecen?
Ambos son netamente ofensivos y verticales. No tienen problemas en llegar hasta la línea de fondo y desdoblar a los interiores o extremos de la banda diestra que les acompañan. Una pesadilla para las defensas rivales. La potencia y su poderío físico son dos de sus señas de identidad más representativas. Llaman la atención por su despliegue y su derroche durante los 90 minutos. No dan un balón por perdido. La lucha y la entrega están aseguradas si ellos están en el once.
Tanto el de Leganés como el gallego comenzaron a destacar desde muy jóvenes. Con apenas 20 años, Salgado debutó en Primera división en las filas del Celta de Vigo, donde enseguida se convirtió en una de las más firmes promesas del fútbol español. Una breve cesión en el Salamanca fue la antesala de un regreso por todo lo alto al cuadro celtiña, donde en el año 98 ya era una firme y patente realidad.
Además, Carvajal es producto propio de la cantera madridista, mientras que los blancos tuvieron que pagar cerca de 12 millones de euros para hacerse con Salgado (si bien, el Real Madrid ha tenido que pagar la mitad de esta cantidad para recuperar al ex del Leverkusen)
Cantidades de dinero aparte, Carvajal apunta muy alto y ya sería un verdadero éxito si se acerca a la gran carrera de Salgado en El Real Madrid. De momento, demos tiempo al tiempo y confiemos en su capacidad.
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