El Atlético le puso 'morbo'





¿Será suficiente?

El 0-1 del encuentro de ida, hace quince días, tuvo un valor incalculable en el duelo de hoy en el Vicente Calderón, en el que los madrileños, sin muchos de sus futbolistas habituales en el once, acumularon fallos sobre la portería rival y acabaron pidiendo la hora, cuando el francés Gregory Coupet salvó el 0-0 en el descuento.

Aunque estaba alertado por la primera sorpresa de la Copa del Rey, protagonizada anoche por el Real Unión de Irún en el Santiago Bernabéu, el Atlético se diluyó con el paso de los minutos. Salió metido en el encuentro y mandó ante un rival colocado, pero sin un fútbol convincente, sin goles y con el enfado de la grada.

Le bastó al conjunto rojiblanco, con numerosas rotaciones en el once, en el que descansaron jugadores como los argentinos Sergio 'Kun' Agüero y Maxi Rodríguez, los portugueses Simao Sabrosa y Maniche o el checo Tomas Ujfalusi, para no sufrir en defensa y crear varias ocasiones en la primera media hora.


Un disparo de Miguel de las Cuevas, un cabezazo y dos tiros del uruguayo Diego Forlán, un centro de Mariano Pernía sin rematador y un potente y ajustado lanzamiento de falta del francés Sinama Pongolle, despejado con una ágil estirada por Burgada, confirmaron la superioridad del Atlético, aunque, de momento, sin goles.

Y eso que el equipo madrileño ya jugaba a medio gas, sin chispa y excesivamente impreciso, al mismo tiempo que el Orihuela ya se veía capaz de acercarse con algo de peligro, todavía mínimo, a la portería del francés Gregory Coupet, tan aburrido como el resto de los espectadores del Vicente Calderón.

Amenazas visitantes

Le despertó de inmediato un contragolpe del conjunto alicantino, en el que el guardameta salvó el 0-1 con una salida rápida ante la amenazante presencia en el mano a mano de Luis García Tevenet, primero, e Ibán Espadas en el posterior rechace. Un aviso serio para el Atlético, despedido con pitos en el descanso.

No cambió la dinámica en la reanudación. Ni siquiera lo hizo una ocasión de Sinama Pongolle, que superó la salida del portero, pero Benja sacó bajo palos, porque un saque de falta de Santi Villa, que se paseó por el área hasta que Coupet lo despejó a saque de esquina, y tres córner seguidos desataron nuevos silbidos en la grada.

Tampoco funcionó el Atlético en la segunda mitad, en la que vivió al filo de la prórroga, inimaginable antes del partido, pero aún posible para el Orihuela a falta de un cuarto de hora para la conclusión del duelo, en el que la desaparición ofensiva del equipo alicantino tampoco calmó la inquietud del bloque rojiblanco.

Ni siquiera la entrada de los portugueses Maniche y Simao Sabrosa y el argentino Maxi Rodríguez, con las que el equipo local ganó algo en profundidad y velocidad ofensiva. Tuvo la sentencia Forlán, a puerta vacía, pero ni por esas logró la tranquilidad hasta que el árbitro pito el final del partido, previa parada salvadora de Coupet. Un alivio para el Atlético.

 

- Ficha técnica:

0 - Atlético de Madrid: Coupet; Seitaridis, Pablo, Domínguez, Pernía; Camacho; Luis García (Maxi Rodríguez, m. 70), Éver Banega (Simao, m. 76), Miguel de las Cuevas (Maniche, m. 59); Forlán y Sinama Pongolle.

0 - Orihuela: Burgada; Pablo, Benja, Iker Guereñu (Pereira, m. 71), Fleky (Inarejos, m. 63), Kily; Juanjo Martínez (Brenes, m. 59), Navarro, Villa; Tevenet; y Espadas.

Árbitro: Javier Turienzo Álvarez (C. Castellanoleonés). Amonestó al local Miguel de las Cuevas (m. 28) y al visitante Benja (m. 84).

Incidencias: partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 10.000 espectadores.