Son la lacra del fútbol y de nuevo vuelven a ser noticia por algo que nada tiene que ver con el deporte en el que se escudan para dar rienda suelta a su locura. Tras el partido entre PSG y Real Madrid, una gran cantidad de imágenes recuerdan como en varios momentos, el partido tuvo que ser detenido ante la gran cantidad de bengalas que ardían desde ese fondo ultra.
El resultado a toda esta vergüenza ha empezado a conocerse ya y es que hasta siete ultras del PSG han sido sancionados con no volver a pisar un estadio de fútbol por el mero hecho de tener y de introducir bengalas. Así lo ha anunciado la policía de Paris en boca del prefecto Michel Delpuech, quién además ha reconocido que en el partido se llegaron a encender...¡¡hasta 150 bengalas!!. Una cifra escandalosa y que desde luego supera todo lo imaginable y pone en tela de juicio la seguridad y la absoluta impunidad que tiene este colectivo en el equipo.
Estos 'angelitos' (entiéndase la ironía), no es la primera vez que la montan de esta manera. En Francia ante el Niza y recientemente frente al Olympique de Marsella volvieron a hacerse notar. Delpuech lo tiene muy claro: "No es admisible que esos hechos pudieran reproducirse con motivo de un partido de tanta importancia" como el que les medía al Madrid en la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones". La cuestión es: ¿ahora qué? ¿habrá sanción económica? ¿cerrarán la grada ultra? ¿cerrarán el campo?...lo que ya no escapa a nadie es que cosas así no se pueden tolerar en un partido de fútbol y menos de la talla de un PSG - Real Madrid.
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