Cazorla Vs Cristiano





La banda derecha es su hábitat natural, su rol favorito y la parcela que les ha metido entre los grandes. Sus ‘diabluras’ rozando la línea de cal, la versatilidad de su juego y la juventud que emanan, han sido las mejores bazas para ganarse un hueco en la agenda blanca. Uno es una estrella consumada, un jugador vital, espectacular, clave y estelar mientras el otro, en un escalón inferior por lo mediático, muestra la calidad española, la raza castellonense y una progresión que va en aumento.

El Madrigal vivirá este martes uno de esos partidos apetecibles para todo buen ‘catador’, pues pondrá en liza a un ascendente Villarreal y a todo un campeón de Europa, un Manchester United dubitativo en este inicio de campaña. Sin embargo, más allá de los Pires, Berbatov, Rooney o cualquier estrella, el choque cruzará los caminos de dos deseos blancos que pudieron vestirse de corto en el Bernabeu pero que, por diversas razones, se quedaron a medio camino: Santi Cazorla y Cristiano Ronaldo.

El villarrealense se destapó en la Eurocopa, donde mostró todas las cualidades que un buen día los scoutings del club amarillo habían encontrado. Santi creció, se ganó un caché y asentó las bases para adueñarse de la banda derecha de España para la próxima década. Versalitidad, capacidad de trabajo, seriedad y una juventud que le asegura continuidad a corto plazo, fueron las cualidades que lo pusieron en el mercado europeo. Allí, el Real Madrid apareció por sorpresa, lo convenció y le regaló la sonrisa unas horas pero Roig no iba a permitir su adiós. Una llamada doblando su sueldo bastó para recordarle que era el comandante de un submarino que no quiere encallarse.

El de Madeira, por el contrario, no necesita presentación. Tras ser el mejor jugador del año como lo reflejará en breve el Balón de Oro, Cristiano se expuso a un posible cambio de ambiente. Old Trafford ya le había dado todo, no quedaba nada para seguir luchando pero un escocés de talante serio y carácter mancuniano, no iba a liberarle de su compromiso como líder ‘devil’. Cientos de portadas, miles de debates y un sin fin de comentarios a dos bandas, terminaron con el luso doblando su nómina y con el Real Madrid anhelando su gran deseo.


La Champions, donde sólo los más grandes dejan su huella, les desafía a ojos de toda Europa. Toca mostrarse, es momento de concretar su nivel, de comparar la grandeza y, sobre todo, de demostrar porqué durante días fueron la ‘comidilla’ madridista. Tarde o temprano, alguien les vestirá de blanco…