Los supositorios culés de la semana

El Infiltrado trae las barbaridades que se dicen del Madrid en medios catalanes





1. Justificando la previsible pitada en la final de Copa del Rey


Las declaraciones (de Esperanza Aguirre) han servido para echar sal y pimienta a una Copa del Rey que no necesita aliñarse con provocaciones políticas. Hay que respetar que los aficionados se expresen libremente. Hace tres años el Rey fue protagonista de una sonora pitada en Valencia y no pasó nada. Mejor dicho, sí que pasó. Se cargaron al director de deportes de TVE que cometió la torpeza de dar la orden de bajar el sonido de la grada y aumentar la potencia del himno para acallar el sentimiento de las aficiones vascas y catalanas. Una destitución ganada a pulso. El problema es que ahora nadie tiene autoridad para cesar a Esperanza Aguirre, porque de verdad, por sus desafortunadas palabras, se lo merecería. En el fondo la presidenta de la Comunidad de Madrid ha provocado el efecto contrario, provocar el enfado de los aficionados que a buen seguro se harán escuchar. En definitiva, lo que pase el viernes antes del inicio del partido es la crónica de una pitada que no va a sorprender a nadie.

 

Respuesta del Infiltrado: Parece que el tema de la semana en la prensa catalana han sido las declaraciones de Esperanza Aguirre sobre lo que debería pasar en la final de Copa del Rey si se produce una pitada al himno español como muchos esperan. Unas postura entendible teniendo en cuenta que en este caso la libertad de expresión pasaría a convertirse en un menosprecio hacia un símbolo nacional como es el himno. Sin embargo, lejos de valorar con normalidad la opinión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, en la prensa catalana han optado por darle la vuelta a la tortilla y usar estas palabras como justificación a lo que hoy (seguramente) ocurrirá en el Vicente Calderón. Aquí vemos como el columnista Josep María Casanovas justifica la pitada y casi la alienta en base a lo dicho por Aguirre. Una verdadera vergüenza.


 


2. Una autodestrucción lógica

En definitiva, el famoso entorno ha reaparecido con fuerza, sin calcular siquiera que dentro de unos días el equipo se juega la final de la Copa del Rey. Un título, por cierto, que el año pasado salvó la temporada del Madrid. Y claro, desde la capital se frotan las manos. Los blancos han pasado de quedarse descolocados con la modélica transición y pensar que Tito podría alargar los éxitos de Guardiola, a ver como los propios culés generan dudas sobre el nuevo proyecto. Mientras, con todo este panorama, la caverna mediática alucina. Desde Barcelona están haciendo el trabajo que habitualmente se genera en Madrid. Todo surrealista. Suerte que ayer Xavi, el capitán, reclamó que todo el barcelonismo reme en una misma dirección. Está bien que alguien lo siga intentando aunque nadie lo haya logrado en los más de cien años de historia de club. ¡Ánimo Tito!

 

Respuesta del Infiltrado: Cuando los hechos saltan a la vista, no es necesario mostrarlos todavía más. Es evidente que hay problemas en el Barcelona y que no todo es de color de rosa como nos llevan vendiendo durante años. La prueba más evidente es que los propios medios pro-barcelonistas admiten la crisis institucional que vive el club, cuando en las últimas temporadas han intentado tapar todos los focos de tensión que se iban creando. Pero ahora se va Guardiola y el club se queda mucho más desprotegido que antes, quedando en evidencia todas las vergüenzas que había. Por eso la prensa madrileña no alucina por todo esto, sino que lo ve como un proceso lógico; lo que es para alucinar es que en todos estos años se haya 'vendido la moto' en Barcelona de manera tan descarada.

 


3. Vendiendo la ilusión de 'Tito' Vilanova

Soy de los que piensa que Mourinho no cumplirá su contrato. Seis temporadas en un club tan grande y mediático como el Madrid son muchas. Demasiadas. Y el currículum del portugués demuestra que sus trayectorias son más bien cortas: dos años y medio en el Oporto, tres en el Chelsea y dos en el Inter. Además de la presión que supone sentarse en el banquillo del Bernabéu (como en el del Camp Nou), Mourinho deberá seguir soportando la comparación constante con un Barça cuyo ciclo (por muchos que algunos se empeñen) todavía no ha terminado. Solo los buenos resultados pueden permitirle la proeza de estar seis temporadas en el Madrid. Pero para impedirlo estará el Barça de Tito Vilanova. Un Barça que sigue contando con el mejor futbolista de la historia (Messi), que sigue ejecutando el mejor estilo jamás inventado y que sigue basando su proyecto en la mejor cantera del planeta. Y que encima tendrá la 'moutivación' extra del portugués. Perfecto...

 

Respuesta del Infiltrado: Mascaró, a Mourinho le encanta la presión del Bernabéu. Mientras Guardiola se va del Barcelona por no poder soportar un quinto año de presión en un gran club, el portugués ha dejado claro con su renovación que está encantado de continuar durante cuatro años más en el Real Madrid. Para el entrenador madridista la presión es algo natural, que le hace sacar lo mejor de sí mismo. En cambio, a Guardiola le destruía. Y no ha podido con ella. Por eso ha dejado tirado al equipo catalán, al que solo se le ha currido recurrir a 'Tito' Vilanova, un entrenador sin ningún palmarés como primer espada de un club. La ilusión del barcelonismo es que con él todo siga siendo igual, pero todo pinta a que va a ser vana. Mientras en el Madrid el proyecto es cada día más sólido y estable, el eterno rival ha tenido que derruir para volver a construir y quizás ya sea tarde para que recuperen a tiempo el terreno perdido en estos meses...

 


4. Desmerecer a Xavi e Iniesta para defender a Messi


Cristiano habla más que juega, y eso es mucho decir, porque juega un rato. Pero le pierde su vanidad exhibicionista, que le lleva a ponerse más medallas que aquel general de 'Senderos de Gloria'. Del lenguaje gestual al celebrar sus proezas futboleras, algunas tan relevantes como ese cuadriceps que enseña, CR7 ha pasado estos días al verbo. Empezó diciendo que él es “mejor que Messi” y siguió con que ya han “acabado con el ciclo del Barça”. Sobre lo primero no opina igual su gremio, que lleva años coronando a Leo. En lo segundo, hagamos cuentas: desde que llegó CR7 al Real, 2 títulos para él y 10 para el Barça, que mañana pueden ser 11, Para colmo, Cristiano no suele ser oportuno. Tanto es así que no fue Messi, sino Esperanza quien ayer le robó plano. Se habló de himnos, no de su ciclo.

 

Respuesta del Infiltrado: Sorprende que en la prensa catalana sean incapaces de darse cuenta de que Cristiano Ronaldo solo respondió lo que diría cualquiera en su situación. Al portugués le preguntaron sobre quién era mejor, si él o Messi y, como es lógico, se nombró así mismo. Un acto que demuestra amor propio y fe en sus propias posibilidades; pues un ganador nunca puede considerarse inferior a su rival. Lo contrario sería una declaración de inferioridad, de complejo. Pero en la prensa culé se lo han tomado muy a pecho y han corrido a sacar datos, despreciando de paso a otros de sus jugadores. Porque en los últimos años la adoración a Messi ha llegado a límites vergonzantes, haciendo incluso de menos a otros grandes futbolistas como Iniesta o Xavi. Por eso ahora muchos argumentan los tres Balones de Oro del argentino, olvidándose que el del 2010 fue totalmente regalado, ya que sus dos compañeros lo merecían mucho más. A ellos quizás les debe el argentino más que nadie tanto premio individual. Porque sin Iniesta o Xavi, quizás ahora ni siquiera habría debate sobre quién es mejor, si Messi o Cristiano...

 


5. Hasta el último día hablando del Bernabéu y la final de Copa

 

La negativa del Real Madrid a ofrecer su estadio para la final, contó con el vociferante apoyo de los elementos más extremistas de la opinión pública mesetaria y pronto se creó un frente de rechazo a que la final se jugara en el Santiago Bernabéu. Para no tener que admitir que les fastidiaba la posibilidad de que el Barça ganara la Copa, recurrían a la descalificación de ambas aficiones, dando ya por descontado que silbarían la presencia del Rey y la audición del himno español. La suposición se basaba en el antecedente de la final disputada también por el Athletic y el Barça, en Mestalla, hace tres temporadas, donde hubo una monumental pitada al himno, sonora para todo el mundo salvo para los telespectadores de TVE, que no ofreció el sonido ambiente. Por lo tanto, las razones de fondo para que el partido no se jugara en el Bernabéu no había que buscarlas en los retretes del estadio madridista sino en una clara manipulación política del hecho deportivo. Si un año silenciaron el sonido, ¿por qué no tratar de silenciar esta vez todo el acontecimiento? ¿Por qué no echarlo de Madrid o jugarlo a puerta cerrada y sin público, como sugiere la presidenta de la Comunidad Madrileña, Esperanza Aguirre?

 

Respuesta del Infiltrado: Por lo visto, en la caverna culé han estado dando la matraca con el Bernabéu hasta el propio día de la final. Ni siquiera la reciente demostración de que el estadio madridista está inmerso en obras parece aplacar al sector barcelonista que soñaba con llevarse el gustazo de levantar la Copa en el feudo blanco. Algunos siguen sin enterarse todavía de que el Real Madrid se ha negado a albergar la final por las dos razones: por las obras y porque su masa social no quería albergar el encuentro. Dos aspectos muy claros al que llevan meses dándole la vuelta, haciéndose los ofendidos y, para colmo, las víctimas. Lo último ha sido que ahora intentan vender que hay motivos políticos detrás de todo esto, cuando realmente solo es un partido de fútbol. Señores, si este encuentro acaba teniendo trasfondo político no será ni por el Madrid ni por los propios políticos, sino porque un sector de los aficionados se dedique a pitar al himno. Nadie hubiera hablado de ello si no hubiera sucedido hace dos años. Así que menos echarle la culpa a los demás de las vergüenzas propias...