La pasada campaña logró la Bundesliga-título que celebró jugando en la última jornada de Liga- para posteriormente, ganar la Copa alemana en una espectacular final contra el Borussia Dortmund. Kroos disputó los 120 minutos de aquel encuentro que supuso una nueva copa de Alemania para el Bayern.
Después llegó el Mundial, campeonato en el que fue titular en 6 de los 7 encuentros. Quizás, aquella actuación contra Brasil, le valió su fichaje por el Real Madrid. Marcó un gol, dio dos asistencias y deslumbró ante una inoperante Brasil. Ante Argentina, cuatro días después, llegaría el gran triunfo: el Mundial 2014.
Pero si tremendo fue su final con el Bayern y con Alemania, impresionante ha sido su arranque con el Madrid. La Supercopa de Europa fue una magnífica carta de presentación. La única pena es que la Supercopa de España se le ha escapado por muy poquito.
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