Si hay un reencuentro que hace especial el Real Madrid - Milán de este martes, además del de Ancelotti con su ex equipo y con su ex jugador Filippo Inzaghi, es el de Diego López con el equipo blanco. El portero gallego se proclamó campeón de Europa la pasada temporada con los merengues como suplente en Champions, a pesar de que Carletto le dio la titularidad en Liga. Después de un año de polémica en la portería, tras el fichaje de Keylor Navas el lucense captó lo que el club quería: que se marchara sin hacer ruido. Y así lo hizo.
Fue una salida pacífica que, sin embargo, dolió mucho a Diego López. Y es que el ex portero madridista cree que el Real Madrid tomó el camino fácil dejándole marchar a pesar de que en aquel momento se encontraba en mejor estado de forma que Casillas. El ahora portero del Milán considera que el club blanco le utilizó como chivo expiatorio para terminar con un debate bajo los palos que estaba haciendo daño, pero del cuál él no era el responsable.
Por este motivo, Diego López pretende ser un muro en el amistoso de este martes ante el Real Madrid y demostrarle al club blanco que cometió un error con su venta. No lo tendrá fácil teniendo en cuenta el potencial goleador del conjunto merengue. De todos modos, aunque cree que Ancelotti y Vecchi no fueron valientes para pedir que se quedara, Diego no guarda rencor al Real Madrid y es un madridista más, hecho que demostró felicitando al club por la conquista del Mundial de Clubes hace sólo una semana. Por este motivo, el reencuentro, aunque con morbo, será amistoso.
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