El Real Madrid está viviendo una intensa semana de trabajo antes de la visita al Camp Nou del próximo domingo y el entrenador del equipo blanco, Carlo Ancelotti, ha hecho lo posible por rebajar el cansancio de estas duras jornadas con una mariscada de unión y confraternización con sus jugadores. El técnico italiano ha invitado a comer a toda la plantilla después de la sesión de entrenamiento para favorecer el buen ambiente y que el equipo cierre filas para el domingo.
La última vez que el equipo blanco vivió un acto de este tipo fue antes de empatar ante el Villarreal y perder ante Athletic y Schalke 04. La plantilla se conjuró para llegar al Clásico con 4 puntos de ventaja sobre el Barcelona con una cena, pero posteriormente los blancos perdieron cinco puntos en dos encuentros y dejaron en bandeja el liderato a los culés. Carletto cree que fue casualidad, y que es importante mantener al grupo unido para alcanzar el éxito. De ahí que haya decidido hacer piña con una mariscada que algunos ya se han empeñado en 'atizar' en las redes sociales.
Pese a las críticas de todos aquellos que están esperando para dar un 'hachazo' a la mínima, Ancelotti es un experto en manejar todo tipo de situaciones. El entrenador italiano es un veterano con mucha experiencia en los banquillos y sabe perfectamente qué es lo que necesita el equipo en cada momento. La mariscada de este miércoles refleja una vez más que el técnico quiere que los jugadores sean algo más que compañeros de equipo, que se sepan entender fuera del campo para que lo hagan también dentro. El domingo veremos si esta nueva conjura da resultados o no.
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