La derrota contra el Barcelona, lejos de hundir a la plantilla, reavivó las ganas de lucha del Real Madrid. Los merengues merecieron más en el ‘Clásico’ y se auto-convencieron que conquistar la Liga y la Liga de Campeones no era una misión imposible. El objetivo estaba muy claro: ganar todos y cada uno de los partidos para llegar con opciones al final de temporada.
En Liga, el Madrid ha sido capaz de encadenar 7 victorias seguidas, ha reducido la distancia con respecto al Barça a tan solo dos puntos, y ha conseguido demostrar que no bajará el pistón en lo que resta de campeonato. Si el Barcelona quiere ganar esta Liga, tendrá que vencer los tres partidos que le restan.
Y en Europa, los de Ancelotti han mostrado una solidez a prueba de ‘bombas’ hasta este martes. Empate a cero en el Calderón, victoria por 1-0 en la vuelta, pase a semifinales, y gran resultado contra la Juventus para soñar con estar el 6 de junio en Berlín.
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