Cristiano ya tiene 30 años y, aunque en los últimos meses se ha comprobado que su fútbol quizá está evolucionando desde la velocidad punta al remate puro, hoy por hoy sigue siendo uno de los dos grandes 'cracks' mundiales. De hecho, a pesar de su evidente bache de inicios de año, sus 48 goles en la Liga han supuesto el tope en esta competición en su ya dilatada carrera, por lo que es innegable que su progresión sigue alimentándose con el paso de los años y las temporadas. De ahí que en el Real Madrid mantengan su plena confianza en él y no estén dispuestos a negociar un traspaso millonario aunque su edad pudiera aconsejarlo.
Así lo deja claro este viernes el diario 'ABC', ya que asegura que en Concha Espina el único precio que le han puesto al futbolista es el de su cláusula de rescisión: 1.000 millones de euros. O lo que es lo mismo, Cristiano sólo se marcharía de Madrid si quisiera hacerlo, porque en el club no hay ni la más mínima intención de mover un dedo en este asunto. Algo que, por otra parte, parece complicado, ya que el propio jugador sabe que está en el mejor club del mundo para pelear siempre por los títulos y estar en la 'cresta de la ola' a nivel individual.
Lógicamente asume que no todas las temporadas pueden ser buenas en lo colectivo, pero mantiene su ilusión intacta. De hecho, su próximo reto es marcar 11 goles más para superar a Raúl como máximo goleador de la historia del Real Madrid. Una cifra que tiene a tiro y que probablemente logrará a principios de la próxima campaña, de forma que su deseo es no moverse a la espera de cómo se desarrolle el trabajo con el nuevo entrenador, Rafa Benítez. Cristiano se llevaba muy bien con Carlo Ancelotti y le dolió la marcha del italiano, pero espera que con su nuevo entrenador también haya 'feeling' y entre todos puedan recuperar la senda de las victorias y los títulos.
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