Aquel día el portero camerunés hizo el partido de su vida. Los blancos lo intentaron de todas las maneras posibles, pero el guardameta africano encontró la inspiración en Chamartín y el Real Madrid fue incapaz de batir a cancerbero malaguista. Hasta 31 disparos realizó el equipo entrenador por Rafa Benítez sobre la portería blanquiazul, pero cuando la pelota no quiere entrar, no entra.
Y lo que no se pudo conseguir en el Santiago Bernabéu tampoco se ha logrado esta tarde en La Rosaleda. El Real Madrid no ha podido llevarse el triunfo en el estadio del Málaga ni se ha cobrado su pequeña venganza. Los blancos estaban obligados a ganar para no perder definitivamente el hilo de la Liga y, a pesar de haber tenido multitud de ocasiones para marcar más de un gol, se han marchado del partido con una gran sensación de impotencia.
En esta ocasión Kameni volvió a estar tan acertado e inspirado como el pasado 26 de septiembre y ha vuelto a evitar la victoria del Real Madrid con otro partidazo. Es raro que los de Chamartín finalicen dos partidos contra un mismo rival sin poder ganar, pero esta vez el Málaga lo ha conseguido. Habrá que esperar a la próxima temporada para desquitarse...
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