El francés, protagonista de las dos últimas grandes remontadas europeas del Madrid
Zidane en el partido jugado en Wolfsburgo
Zinedine Zidane va camino de ser el mejor 'amuleto' de los últimos años del Real Madrid. Hasta esta noche el Real Madrid llevaba la friolera de 14 años sin vivir y disfrutar de una gran remontada en la Champions League, pero por fortuna el Bernabéu ha revivido esas viejas sensaciones con el Wolfsburgo. Y el denominador común de las dos últimas ha sido el técnico francés.
El ciclo se ha cerrado con la clasificación de este martes para las semifinales. Y por varias razones. La principal está en la presencia de
Zidane en el equipo, ya que en la temporada 2001/02 estuvo en el once inicial que logró superar al
Bayern de Múnich por 2-0 para levantar el 2-1 que había encajado el equipo en el partido de ida. Entonces el
Madrid también se jugaba el pase a las semifinales y logró darle la vuelta al marcador merced a los goles de
Helguera y Guti. Dos tantos de pura 'garra' que han servido de inspiración para que casi tres lustros después el madridismo se haya reencontrado con sus grandes noches europeas.
Pero además de
Zidane, cabe destacar también un segundo detalle. Y es que el
Wolfsburgo también es un equipo alemán como el
Bayern, por lo que el
Real Madrid también ha dejado claro que los equipos alemanes son su víctima predilecta a la hora de hacer machadas en las competiciones continentales. No en vano, en diciembre de 1985 el club ya brindó a su afición una de sus remontadas más memorables al superar por 4-0 al
Borussia Mönchengladbach tras perder la ida por 5-1. Esta vez no ha hecho falta lograr una diferencia tan marcada de goles, pero la satisfacción seguramente ha sido similar y ha rejuvenecido 30 años a más de un aficionado merengue.
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