La fórmula de Cristiano para llegar antes de lo esperado

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El futbolista cayó lesionado el pasado 10 de julio y el madridismo rápidamente hizo cuentas con la esperanza de que pudiera jugar ante el Sevilla en la Supercopa de Europa. Pero el club rápidamente despejó esta ilusión al establecer su fecha de regreso al equipo justo un día después, el 10 de agosto. Finalmente acabó adelantado su vuelta unos días, por lo que ya acumula casi diez jornadas de trabajo en Madrid en las que ha trabajado en doble sesión para terminar de dejar atrás su lesión. Mañana y tarde, sin parar, y todo para acortar su regreso en unos cuantos días.

Para Cristiano la diferencia es clara, pues tiene dos opciones: estar el 27 de agosto ante el Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu o esperar dos semanas más - por el parón de los partidos de selecciones - para estar ante el Osasuna, también en casa, el 10 de septiembre. Una diferencia evidente de días que el 'crack' prefiere evitar, ya que su deseo y su objetivo es poder vestirse de corto la semana próxima.

Para él estar dos meses sin jugar es mucho tiempo y aspira a recortar los plazos de forma drástica, de forma que está siguiendo un plan especial de rehabilitación que incluye dobles sesiones de entrenamientos diarios, primero en Valdebebas y luego en su propio domicilio; e incluyendo los días libres de la plantilla. Y es que así es él, pura ambición hasta cuando está de baja.