Hoy en día Zidane triunfa como técnico, pero hasta hace pocos años lo hacía vestido de corto sobre los terrenos de juego. Por eso la UEFA siempre le tiene muy presente en su sede de Nyon (Suiza), ya que como destaca el periodista José Féliz Díaz el marsellés tiene su propio rincón en este lugar. En él prácticamente todo el protagonismo es para el tanto que anotó el 15 de mayo de 2002 en el Hampden Park escocés, una preciosa volea que sirivió para decantar el triunfo (2-1) merengue en la finalísima de la Champions ante el Bayer Leverkusen alemán.
Así, a través de un moderno monitor se puede disfrutar una y otra vez en bucle de la mágica jugada, así como de su recreación táctica sobre un modelado 2-D. Aunque esto no es lo más destacado, pues la auténtica 'joya de la corona' es el propio balón con el que 'Zizou' anotó ese legendario gol. Los visitantes a la sede de la UEFA pueden contemplar en persona este mítico objeto, así como disfrutar de las mejores imágenes del que está considerado por muchos como el mejor gol que se ha marcado jamás en una final europea. Todo un regalo para los sentidos de cualquier buen aficionado al fútbol que se precie.
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