La principal arma de Dembélé es el regate. Un jugador que permanentemente encarga e intenta el desborde, un desborde arrollador. Con piernas y zancada muy largo, a todo esto le suma una gran explosividad, un gran regate y un cambio de ritmo con el que los zagueros del Real Madrid tendrán que tener mucho cuidado.
Se siente muy cómodo al contraataque. Es cierto que habitualmente el Dortmund es el que tiene el control del partido y en esas situaciones le cuesta más, pero teniendo en cuenta que esta noche el rival es el Real Madrid, cabe la posibilidad de que Tuchel quiera aprovechar la velocidad que tiene arriba con Dembélé y Aubameyang y hacerle daño a los blancos a la contra.
Eso sí, todavía tiene ciertos aspectos que pulir. Es muy joven y tácticamente le cuesta, sobre todo a la hora de replegar. Además es un jugador que habitualmente pierde una gran cantidad de balones, por el hecho de buscar siempre el regate. A sus 20 años, Ousmane Dembélé está llamado a ser uno de los mejores jugadores del mundo en los próximos años.
DEJA TU COMENTARIO