Cristiano podría presumir de Balón de Oro ¡en la cara de Messi!

Si, como parece, las fechas cuadran, Cristiano podría ofrecer el Balón de Oro del 2017 al Bernabéu el día del clásico ante el Barcelona.


Cristiano y Messi

Cristiano y Messi




Como suele ser habitual, el galardón se entregará en la primera quincena de diciembre, máxime este año que el Real Madrid tendrá que disputar el mundial de clubes y ahora suele hacerse ‘en diferido’, es decir, grabando un vídeo en los días previos a hacerse oficial el ganador del premio.

Por tanto, si tenemos en cuenta que el fin de semana del 9-10 de diciembre se jugará en el Bernabéu el Real Madrid-Sevilla, y ahí Cristiano podría no haber recibido todavía el Balón de Oro del 2017…¿cuál sería el siguiente partido que se disputaría en el Bernabéu en ese mes de diciembr? ¡El clásico!

Por tanto, estamos ante la posibilidad, nada  remota, de que Cristiano Ronaldo sea condecorado con su quinto Balón de Oro…y lo ofrezca en sociedad al Santiago Bernabéu aprovechando la visita del Barcelona al estadio blanco el 20 de diciembre (fecha que podría retrasarse algo en función de la participación de los de Zidane en el Mundial de clubes).

¿Os imagináis a Cristiano alzando el trofeo de mejor jugador del mundo en las barbas de Messi? ¿Cómo se le quedaría la cara a Piqué viendo ese baño mundial de madridismo, ante millones de personas, y con el Bernabéu entregado? ¡Sería mágico!


Por el momento no deja de ser una especulación aunque tanto por las fechas como por la justicia que supondría que Cristiano se volviera a llevar este trofeo, ese clásico del Bernabéu podría ser histórico.


Cristiano se siente perseguido por su sanción:

El mejor jugador del mundo está molesto con el trato que sigue recibiendo. Sabe que se equivocó con el empujón a De Burgos Bengoetxea, pero no comprende que no le quitaran la segunda amarilla del Camp Nou.

Cristiano Ronaldo vuelve a sentirse maltratado una vez más. Y no es para menos dado los últimos acontecimientos surgidos en torno a su sanción tras el partido de ida de la Supercopa de España ante el Barça en el Camp Nou. El diario Marca afirma que el portugués está enojado y se siente perseguido especialmente porque no se le quitó la segunda amarilla, aquella que le mostró el colegiado al interpretar que simuló penalti.

Sin embargo, las imágenes, que han sido analizadas en profundidad, demuestran que hubo contacto y que en ningún caso CR7 se tira tratando de engañar a un De Burgos Bengoetxea que estuvo superado por las circunstancias en todo momento. Todo indicaba a que a Cristiano le quitarían la segunda amarilla y por lo tanto la sanción se reduciría de cinco a cuatro partidos, pero aun con las imágenes en la mano esta rebaja no se ha producido, algo que el crack mundial no entiende.

Entonces, tal y como señala Marca, Cristiano pasó a pensar que algo raro pasa contra su figura. Era incomprensible que no le quitaran una amarilla que, tal y como quedó demostrada, estaba mal señalada. Y esta es una sensación que el portugués siente de cerca desde hace ya unos cuantos años.