¡Indignante: el PSG quiso dejar al Madrid a merced de sus ultras!

Según 'L'Equipe' el equipo galo pidió retirar la escolta del autobús merengue


El PSG no quiso proteger al Real Madrid de sus ultras

El PSG no quiso proteger al Real Madrid de sus ultras




En este sentido el conjunto parisino hizo piña con sus peligrosos ultras y se apoyó en ellos para crear un ambiente casi bélico durante la previa del partido. De hecho, el PSG publicó algunos vídeos con imágenes de sus jugadores y de los aficionados radicales, e incluso miembros de su plantilla se dejaron ver en público con los principales cabecillas de estos grupos de fans. Todo con tal de generar un clima irrespirable que pesara sobre el actual campeón de Europa y le llevara a hacer un partido aciago.

Sin embargo, el tiro les salió por la culata y en lugar de eso el Real Madrid protagonizó la mejor actuación de la temporada. El conjunto blanco aplastó a su rival, ganó por 1-2 el duelo de vuelta y fue justo merecedor del billete para los cuartos de final. De hecho, salió indemne de la citada 'encerrona' y también muy reforzado por la imagen mostrada. Aunque lo cierto es que, una vez que sabemos nuevos datos sobre el maquiavélico plan del PSG, hay que dar gracias de que no ocurriera nada serio en los momentos anteriores y posteriores al choque.

Y es que el diario 'L'Equipe' informa este sábado que el conjunto francés llegó demasiado lejos en su intento de intimidar al Real Madrid. En concreto, al punto de que uno de sus directivos llegara a pedir a las autoridades parisinas que no le pusieran escolta al autobús del equipo blanco, de forma que el traslado entre su hotel de concentración y el estadio Parque de los Príncipes se convirtiera en un auténtico infierno por la acción de sus ultras.

Sin embargo, por suerte la lógica y la cordura imperaron entre los mandos policiales de la ciudad y el Real Madrid fue protegido por los efectivos habituales en estos casos. La seguridad de un club de fútbol es algo muy serio como para tomárselo a broma, por lo que los responsables locales sabían que no podían correr el riesgo de que al autobús merengue le sucediese algo camino del estadio. La responsabilidad era enteramente suya y ni siquiera los intereses deportivos del PSG podían ponerse por delante de la misma. De ahí que nadie tomara en cuenta esta petición vergonzosa y lamentable, y que ahora nadie tenga que lamentarse de nada. Aunque lo que nadie puede evitar ya es que la relación entre el club francés y el español se vea afectada, porque lo ocurrido estos días es algo que en Madrid van a tardar en olvidar.