Debido a toda esta incertidumbre, los ingleses necesitan moverse lo más rápido posible en el mercado de fichajes, por si acaso se encontraran con algún impedimento legal en los próximos meses. En esa hoja de ruta que tienen trazada desde Manchester hay dos nombres que destacan de forma especial. Se trata de dos futbolistas del Real Madrid, Isco y Marco Asensio.
Y es que según nos han confirmado en Defensa Central varios periodistas ingleses a los que hemos tenido acceso, parece que Guardiola tiene claro que los dos jugadores madridistas son los ideales para continuar con su proyecto en Inglaterra.
El conjunto de Manchester lleva mucho tiempo siguiendo a Isco porque le consideran el sustituto ideal de David Silva, un jugador que a sus casi 33 años empieza a considerar de forma seria su vuelta a España tras una prolongada aventura en las islas. Por eso, Guardiola cree que Isco “es el mejor recambio” ante la más que probable salida de Silva en un periodo máximo de año y medio. Es tal el interés de los ingleses en Isco que, según nos confirman estas mismas fuentes, estarían dispuestos a poner cerca de los 70-80 millones de euros para contratarle.
Este deseo de 2x1 que pretende marcarse Guardiola engloba también a Marco Asensio. El joven jugador mallorquín no está teniendo toda la regularidad que desearían en el Madrid, sin embargo, su apuesta por él es máxima. El City lo sabe pero, a pesar de ello, pretenden poner encima de la mesa una cifra similar a la que darían por Isco, alrededor de los 60 millones de euros, para fortalecer su ataque con un jugador que, por sus condiciones, piensan que se adaptaría a la perfección al fútbol inglés porque domina a la perfección el juego en espacios largos, tiene buena conducción y gran remate desde fuera del área. Cualidades que hacen de Marco un jugador muy apetecible para el equipo de Manchester.
La operación se antoja prácticamente imposible porque el Madrid no desea vender a ninguno de los dos jugadores. Isco y Asensio tienen el cartel de intransferibles, salvo que Solari diga lo contrario en los próximos meses, algo que salvo sorpresa no va a cambiar porque son dos jugadores nacionales, con peso específico en el club, y a los que se considera parte importante del presente y el futuro del equipo blanco. Aún así, en las próximas semanas o en los meses sucesivos, podría llegar esa oferta conjunta por valor de 130-140 millones de euros. Una cifra muy jugosa pero que, en condiciones normales, no va a servir para que el Madrid mueva un dedo y le abra la puerta a alguno de sus dos internacionales.
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