La reacción del Bernabéu cuando se nombró a Guardiola y a Haaland por megafonía: un escándalo

El estadio blanco registró una de las mejores entradas de la temporada y no defraudó al equipo


El Bernabéu reaccionó a la llegada de Guardiola y Haaland

El Bernabéu reaccionó a la llegada de Guardiola y Haaland




El Santiago Bernabéu ya está viviendo otra gran noche europea más. El Real Madrid hace frente al Manchester City por la ida de los cuartos de final de la Champions League, un partido para el que la afición se ha organizado: “9/4/2024. Un Bernabéu vestido de blanco". Esta pancarta colgada por la Grada de Animación hizo pública una premisa que incluso llegó a los jugadores del primer equipo.

El recibimiento al Real Madrid y al Manchester City ha sido totalmente distinto. Mientras que los pupilos de Carlo Ancelotti han entrado escoltados por vítores y aplausos, los jugadores entrenados por Pep Guardiola se han encontrado con los primeros pitos y silbidos de la noche. Las reacciones más llamativas, hacia el propio entrenador catalán… y Erling Haaland.

A pesar de todos los rumores de fichaje que circulan, vinculando al ‘9’ escandinavo y la entidad presidida por Florentino Pérez, no se preveía una reacción especial cuando la megafonía del estadio blanco anunciara su nombre. Así ha sido: los aficionados blancos no han mostrado una reacción mayoritaria, manteniendo un tono neutral ante una de las grandes estrellas rivales.

Prioridades claras

Todo lo contrario ha sucedido con Pep Guardiola. La larga serie de desencuentros que une al entrenador catalán con la afición madridista se ha hecho presente en forma de una breve pitada al escuchar su nombre en la megafonía del estadio. Esta reacción, tomando en cuenta el historial y la animadversión de los seguidores merengues hacia el técnico sky blue, era lo esperado… sobre todo en un día de partido ‘grande’.


La reacción del Santiago Bernabéu a los rivales más destacados en el partido de ida de los cuartos de final contra el Manchester City es solo el principio de lo que se esperan en las gradas blancas: los aficionados estarán conectados con el ritmo del encuentro desde el primer minuto y serán claves para obtener el mejor resultado posible.