Fue el lesionado Cristiano Ronaldo, que, junto al argentino Ezequiel Garay, continúa ejercitándose por su cuenta en el gimnasio, quien rompió el hielo con su risa al saltar al césped. Desde el 10 de octubre, un esguince de tobillo mantiene alejado del terreno de juego al luso, que será baja el sábado ante el Getafe y también en el partido de Liga de Campeones del martes contra el Milán.
Sin ninguna otra ausencia y tras una charla de más de diez minutos del técnico chileno, Manuel Pellegrini, los futbolistas blancos comenzaron el calentamiento con una carrera en la que intercambiaron comentarios y numerosas bromas, a la que siguieron estiramientos. Así, la buena noticia de la jornada fue la reincorporación al grupo de Pepe, tras haber causado baja en Alcorcón a consecuencia de unas molestias.
Después, mientras los porteros Casillas y Dudek realizaban ejercicios de captura de balón junto a otro de los entrenadores, el resto de la plantilla inició una sesión de pases y relevos al mando de Pellegrini, cuyas órdenes pudieron escucharse de forma clara. "Más rápido, Sergio. Más rápido, Raúl", animaba el chileno a sus hombres, entre los que estaban los canteranos Juanan y Opare.
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