'CR9' también hizo 'amigos' en Bilbao

El jugador madridista fue increpado durante todo el encuentro en San Mamés





El Real Madrid se plantó en un territorio tradicionalmente hostil como es Bilbao a la caza de tres puntos que no terminó de encontrar. El partido fue frenético, intenso, sin respiro, como cada partido en La Catedral. Para algunos de los integrantes de la plantilla madridista esto no fue ninguna sorpresa, pero para algunos debutantes, pese a estar acostumbrados a actuar en campos de fútbol con un ambiente adverso, debió suponer toda una aventura.

Uno de ellos fue Cristiano Ronaldo. El delantero luso volvió a ser el centro de las iras de la afición rival, una hinchada que no parece soportar bien la grandeza futbolística del madridista. La envidia es lo que tiene. Por ello, en cada acción del portugués, el público se le echaba encima, tratando de poner nervioso con sus improperios y pitadas a un futbolista que parece esculpido en piedra. Los ataques verbales rebotan en él como si de un Superman del balón se tratara. 'CR9' volvió a ser la punta de lanza de un ataque 'merengue' con el punto de mira desviado en esta ocasión y, aunque finalmente se marcharon sin un resultado productivo, el portugués volvió a demostrar que hace falta mucho más para amedrentarle.

Esta triste escena de ataque irracional contra un futbolista comienza a ser una constante esta temporada pero no resulta nueva, no, al menos, para alguien acostumbrado a vivir en los extremos (del campo y fuera de él). Ya en la última salida de su equipo en la jornada 16 a Pamplona, Cristiano tuvo que lidiar con un público embravecido. En aquella ocasión, el portugués estuvo algo más ausente (se encontraba en el campo un Higuaín que cada jornada reclama más protagonismo), pero siguió demostrando una fortaleza física y mental insólita en un joven de su edad.

"Por un oído me entra y por otro me sale", ha reconocido el propio jugador sobre los sonoros recibimientos que cada semana acompañan a sus actuaciones en determinados campos de fútbol. Pero no hay problema. Cristiano Ronaldo, que cuenta aún con tan sólo 24 años, sabe que la manera de combatir el estruendoso huracán que le acompaña en sus desplazamientos es con su fútbol. Y es que, Cristiano Rolando les dejará en la próxima ocasión con la boca cerrada.