Concretamente, el club blanco ha invertido unos 40 millones de euros en refuerzos para la próxima campaña: 25 millones en Di María, 5'5 en Canales contando con que se quedará en el Real Madrid ya esta temporada, y aproximadamente unos 10 millones de euros por Pedro León, a pesar de que no se han oficializado las cifras por parte de ningún club. Y mientras tanto, el FC.Barcelona ha desembolsado ya 50 'kilos' en los fichajes de Villa y Adriano.
Pero más allá de la situación del mercado a día de hoy, lo cierto es que con la llegada de Mourinho parece que se ha dado un giro en el Real Madrid en la política de fichajes. Después de la fuerte inversión realizada el verano pasado por Ronaldo, Kaká, Benzema, Xabi Alonso, Albiol, Arbeloa y compañía, el entrenador portugués dijo en su presentación que no quería grandes nombres sino jugadores que se adaptaran a su esquema táctico, y efectivamente parece que lo están cumpliendo.
Y es que han sonado nombres como Maicon, Jesús Navas, Schweinsteiger, Gerrard o Kolarov, pero el luso se ha negado a pagar los 35, 60, 40, 50 ó 20 millones que han pedido respectivamente los clubes por estos jugadores. En su lugar, ha propuesto otros jugadores que puedan valer para el Madrid con un precio mucho más ajustado. Y ahí están los Khedira (aproximadamente 15 millones de euros), Özil (entre 12 y 16 millones de euros) o Thiago Silva (que ronda también los 15 'kilos') que suenan permanente en los medios y que confirman lo que Mourinho ya avisó el pasado 31 de mayo: que se tratará de no pagar ni un euro de más por el simple hecho de llamarse Real Madrid.
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