Los mitos honoríficos del madridismo

Emilio Butragueño

Porque no hay muchos jugadores que hayan dado a toda una generación, el buitre marcó época en los 80 revolucionando el juego con su talento. Los que ahora alaban el fútbol de la selección han de agradecer al menudo futbolista rubio que llevase al Real Madrid y a España la combinación y la técnica. Con Míchel, Pardeza, Sanchís y Martín Vázquez formaron una generación inolvidable que debutó bajo las órdenes de Di Stéfano en el primer equipo del Real Madrid. Su palmarés con la entidad blanca, abarca entre otros títulos 6 ligas, 2 Copas de la Uefa y 4 Supercopas.

Raúl González Blanco

El actual embajador de La Liga en EE UU es uno de los ídolos de la parroquia blanca. De la mano de Jorge Valdano, debutó en el primer equipo a los 17 años ante el Real Zaragoza. Una semana más tarde, estrenó su faceta goleadora marcando en el derbi ante el Atlético de Madrid. Ahí empezó una leyenda que se forjó a base de ligas, copas y Copas de Europa. Aún son muchos los que recuerdan como el destino le debe el balón de oro que tiene Owen en sus vitrinas. El “7” del Madrid también lo fue de la selección con la que fue subcampeón de la Eurocopa Sub-21 en 1996 y con la que disputó los Juegos Olímpicos de Atlanta semanas antes de debutar en Praga con la absoluta. Sus 741 partidos y 323 goles le harán un fijo candidato de futuro a la presidencia de honor del Bernabéu.

Iker Casillas

Con 18 años y 115 días debutaba el joven de Móstoles en la portería del Real Madrid siendo el portero más joven de la historia del club. Sus números son de grande con 725 partidos oficiales y el jugador con más titularidades en la historia del club. Campeón del Mundo y Europa con la selección, levantó cinco títulos de Liga y tres Champions League. Pese a su descafeinado final antes de su paso al Oporto, el guardameta es historia viva del fútbol español.

Zinedine Zidane

El francés aún tiene mucho recorrido como entrenador aunque tras proclamarse campeón de Europa con el club como jugador y como entrenador, es un digno embajador del madridismo. El segundo de los fichajes galácticos de la primera época de Florentino como presidente, hizo campeón a los blancos en Glasgow con el que ha sido bautizado como el mejor gol de las finales de Champions League. Como entrenador, ya ha conquistado su primer título europeo derrotando al Atlético de Madrid en una final a la que pocos aficionados soñaron llegar. Si sus registros continúan, Zidane será un perfecto aspirante a la presidencia honorífica.

Reportajes DC