El Barça abusó del Guangzhou gracias a un vergonzoso piscinazo

El conjunto culé aprovechó un clamoroso error arbitral para golear

A día de hoy la diferencia futbolística entre el Barcelona y el Guangzhou chino es abismal. Y así ha quedado demostrado este jueves en la segunda semifinal del Mundial de Clubes, ya que el conjunto catalán se ha impuesto sin problemas por 3-0, con un hat-trick de Luis Suárez. Sin embargo, el resultado ha estado 'inflado' por un vergonzoso penalti que se ha sacado de la manga Munir. El canterano ha dado una imagen lamentable al hacer un piscinazo en la segunda parte cuando el partido ya marchaba 2-0. Por tanto, no había ninguna necesidad de aprovecharse así de la candidez de su rival, pero ya se sabe que en el club culé el fin justifica los medios. Ni en los torneos menores ganan sin ayudas arbitrales. Para que luego se quejen de 'Ligas preparadas' y arbitrajes a favor del Real Madrid...




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