Laporta vive en un mundo de color de rosa

Laporta censuró a Masfurroll por haber declarado que las auditorías de seguridad a Jaume Ferrer, Joan Franquesa, Joan Boix y Rafael Yuste tuvieron un coste de 367.000 euros, y no de 58.000, como sostiene el director general, Joan Oliver, respaldado en todo momento por el presidente.

"No se pueden lanzar estas falsedades en público", lamentó Laporta, "porque no benefician ni a la persona que las dice ni al club. Crea una sombra de sospecha que no procede". El presidente aconsejó a Masfurroll "que rectifique o que demuestre" su tesis, aunque avisó de que "no lo podrá demostrar porque lo que dice no es cierto".

"Ya explicamos cómo había ido todo y cuánto costó. Así que le agradecería (a Masfurroll) que deje de intoxicar, y más en esto momentos. Vivimos el mejor momento de la historia del club, pero hay señores empeñados en crear dudas y sospechas".

Laporta, que esta tarde asistirá en directo al partido entre el Rubin Kazan y el Barcelona, afirmó que asistió a las declaraciones de Masfurroll con "una fuerte decepción" y recordó que del paso del ex vicepresidente por el club, en la época de Joan Gaspart, "habría mucho que decir, pero nosotros siempre procuramos mirar hacia el futuro".

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