Romperse el culo por el compañero II

Por primera vez desde que tengo el privilegio de ser columnista de esta web repito el título de una columna. La frase en cuestión, algo escatológica y poco académica, les sonará probablemente más ahora que entonces. Su inventor es Gaby Heinze, un futbolista al que le han llovido los palos y las críticas esta semana por hacer una falta innecesaria a Kuyt que acabó suponiendo el gol del Liverpool. Claro que si alguien se hubiera encargado del marcaje de Benayoun para impedir que no rematara completamente solo, pues probablemente el partido hubiera acabado 0-0.

Las cámaras de Cuatro captaron hace unas semanas en el túnel de vestuarios de Los Pajaritos, la arenga que yo les conté ya la temporada pasada, la que repite Heinze partido tras partido a sus compañeros. Como una imagen vale más que mil palabras, si tuvieron la oportunidad de verla seguro que se les quedó grabada por lo expresiva y lo gráfica que es… Como si de un ritual se tratara, el defensa argentino sale el último del vestuario y pronuncia la esperada frase que resume su manera de entender el fútbol: “Romperse el culo por el compañero. Sólo así seremos grandes”. El 'Gringo' entiende que el equipo está por encima de todo y que la solidaridad colectiva es la clave del éxito.

Heinze se reencontrará esta noche en Montjüic con su ‘hermano’ Pochettino. Con él protagonizó en París una de las anécdotas más graciosas de su carrera. El Paris Saint Germain les fichó a los dos de una tacada lo que levantó una gran expectación en la afición para ver su debut. Además, al Parque de los Príncipes acudió a verles el por entonces seleccionador argentino Marcelo Bielsa que tenía en mente convocarles con la albiceleste. En los primeros minutos de partido, los dos centrales chocaron entre sí quedando seriamente lastimados. “¿Qué tal estás?”, - le preguntó Mauricio a su compatriota. “Bien”, - respondió Gaby. Mentía porque cinco minutos después tuvo que pedir el cambio. Para colmo, Pochettino fue expulsado antes del descanso, con lo cual la afición y Bielsa se quedaron con las ganas de ver a los que serían meses después centrales de Argentina. Seguro que cuando se vean hoy recordarán esta anécdota antes del partido; después la amistad se dejará a un lado y cada uno mirará para lo suyo.

Precisamente los madridistas esperan hoy que sus vecinos rojiblancos, se “rompan el culo por su compañero”. Aunque algunos atléticos (no sé si los más o los menos acérrimos) prefieren que su equipo pierda con tal de que el Real Madrid no se acerque un poco más al Barça, creo que ya nadie tendría ninguna duda de que habría liga si los blancos se colocan a 4 ó 5 puntos del líder este fin de semana. Como saben, tengo claro desde hace más de un mes que el campeonato no está decidido. Todavía hay muchos que se ríen cuando se lo digo, aunque si los chicos de Juande Ramos le meten otro mordisquito al Barça en esta jornada creo que ya nadie se atreverá a rebatirme.
 



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