Reglamento desigual

"No me extrañaría que intenten cambiar el reglamento para que no se les pueda sancionar y considerar que todo lo que hagan sea en defensa propia y en consecuencia, no sancionable"

Es increíble la cantidad de improperios que hemos tenido que escuchar durante estas últimas horas a raíz de la sanción impuesta a nuestro míster de 2 partidos y uno al segundo del Barça por los hechos acontecidos durante la pasada Supercopa de España. A la conclusión inicial que llego es que ellos son intocables y sus opiniones no son discutibles bajo ningún punto de vista. Ellos, para variar, tienen la razón absoluta. Nosotros siempre salimos beneficiados. Para ellos (cuando me refiero a "ellos" me vuelvo a referir a los que están al lado de ese país pequeñito de ahí arriba, que se llama Andorra, que es el más cercano al nordeste de España) la sanción a Mourinho tenía que haber sido a perpetuidad, de otra forma nunca se hubiesen quedado contentos, tal y como estamos viendo.

Lo que les duele, a parte de que no se haga su justicia e inhabilitar a nuestro entrenador de por vida, es que se hayan atrevido a sancionar a uno de sus intocables, eso les supera su ego personal y no pueden admitirlo. Se han atrevido a tocar su supuesta perfección en todos los ámbitos y no lo pueden tolerar.

Intentando ironizar en lo expuesto anteriormente, lo que está claro es que se ha aplicado por una vez el reglamento para ellos y han recibido lo que les tocaba, aunque alguno podamos considerar que el resultado de la sanción al segundo entrenador culé sea injusto, porque, digo yo ¿cuándo dos jugadores se enfrentan en el terreno de juego y hay un atisbo de violencia entre ellos, normalmente no se les saca el mismo color de la tarjeta de amonestación, independientemente de quién hubiese iniciado la trifulca? Por lo tanto, le han perdonado un partido al Sr. Vilanova.

No me extrañaría que viendo lo sucedido y la buena relación que tienen con los diferentes estamentos futbolísticos a nivel nacional e internacional, intenten cambiar el reglamento para que no se les pueda sancionar y considerar que todo lo que hagan sea en defensa propia y en consecuencia, no sancionable.

Hasta ahora no les había ido nada mal, a parte de los arbitrajes tan analizados en partidos de Champions y liga, todavía estamos esperando algunos a ver cuándo cumplen la sanción del cierre del Camp Nou, por lanzar una cabeza de cochinillo, una botella de lícor e innumerables objetos al terreno de juego durante aquel partido entre el Barça y el Real Madrid. También hay que tener en cuenta que son el único equipo que se ha negado a jugar una eliminatoria copera haciendo una pantomima poniendo sólo a 8 jugadores sobre el terreno de juego. Todavía quedan muchos más ejemplos como el mecherazo a Roberto Carlos, pero los iremos dosificando para írselos contando y recordando con el paso del tiempo.

Para finalizar sólo me cabe hacer una pregunta, a la que de momento no quiero dar respuesta. ¿Por qué genera tanto miedo el Barça a algunos estamentos? ¿Qué favores tienen algunos pendientes con el club culé? Tranquilos, lo iremos desvelando.



Reportajes DC