Gabi, un capitán muy poco modélico
El jugador del Atlético de Madrid Gabi sorprendió este jueves a propios y extraños al confesar haber formado parte de los actos supuestamente irregulares que acontecieron con motivo del Levante-Zaragoza de 2011. El futbolista reconoció haber ayudado al presidente maño por entonces, Agapito Iglesias, a mover una cantidad de dinero que podría haber servido para pagar las primas a terceros. A pesar de justificar sus actos afirmando que desconocía la realidad de los hechos, esta confesión viene a dejar claro que el futbolista colchonero no es precisamente un futbolista modélico que pueda adjudicarse el papel de 'Robin Hood' del fútbol como hizo hace unos días en una entrevista.