El Madrid por fin retomó el pulso visitante
El equipo blanco no ganaba a domicilio en Liga desde la victoria en el Vicente Calderón del 19 de noviembre.
Ganar a domicilio siempre es importante para poder conseguir los objetivos en Liga. El Real Madrid visitaba este sábado al colista con esa intención, pero con antecedentes negativos a domicilio. Y es que los blancos llegaban después de encadenar un empate y una derrota lejos del Bernabéu.
De este modo, el conjunto merengue no conseguía ganar un partido fuera de casa desde que ganó al Atlético de Madrid en el derbi del Calderón, el 19 de noviembre. Después de eso, había disputado sólo dos encuentros más lejos de casa: ante el Barcelona en el Camp Nou, sumando un empate, y ante el Sevilla en el Pizjuán, en el choque que supuso la primera derrota del Madrid esta temporada.
Desde que Zidane tomó las riendas del equipo, el Real Madrid nunca había encadenado más de dos partidos sin ganar a domicilio. Así, el conjunto merengue esperaba que a la tercera fuera la vencida y retomar por fin el pulso ganador fuera del Bernabéu ante Osasuna. Así fue, victoria que permite al Madrid seguir mirando a sus rivales por el retrovisor incluso a falta de disputar sus dos choques aplazados.