Noticia DC: lo que hará Florentino con Zidane si el Madrid cae en Turquía

El presidente no va a tomar ninguna decisión en caliente pase lo que pase en Turquía.

El Real Madrid se juega este martes en Estambul algo más que un examen final. El futuro del equipo en Champions podría verse muy comprometido si no ganan al Galatasaray y es cierto que existen dudas acerca de la continuidad del francés. El club es consciente de que el equipo no está en un buen momento y que el juego no convence a ningún sector del Santiago Bernabéu. Sin embargo, el presidente no despediría a Zinedine Zidane si cae en Turquía. No es el modus operandi del club y la figura del entrenador francés merece un respeto distintivo que no pasa por un despido fulgurante. 

Situación muy delicada la que atraviesa el Real Madrid a estas horas del martes 22 de octubre. Aún no han saltado los protagonistas al terreno de juego pero la tensión, por más que se quiera negar, es evidente. Hay mucho en juego. No solo para Zinedine Zidane, que sería el gran perjudicado si no ganan, sino para una plantilla que no está ayudando ni mucho menos a sofocar las críticas al francés. La mayoría de ellos han logrado todo lo que se puede ganar en la carrera de un futbolista. Tienen un mérito terrible y nunca nadie podrá reprochar lo que han conseguido con el Madrid. Sin embargo, sus carreras no acabaron en Kiev el 26 de mayo de 2018. Aún siguen defendiendo la camiseta del conjunto blanco y, mientras tanto, no se pueden bajar los brazos. (Noticia DC: el vestuario quiere dedicarle una victoria a alguien especial).

Zidane no es el mejor tácticamente. Tampoco un visionario desde el banquillo. Pero el francés consiguió algo que nunca antes nadie había hecho. Ganó tres Champions consecutivas y elevó al Real Madrid a lo más alto. Puso al equipo de su vida en un lugar dónde nadie había estado. Con mucho más por perder que ganar, volvió a asumir el riesgo de dirigir al conjunto blanco en un momento malísimo. Lo hizo por amor al club, al presidente y a sus jugadores. Siempre les ha defendido (aún cuando no tocaba) y jamás ha dicho una mala palabra de ellos. Ahora, el balón -y nunca mejor dicho- está en los pies de los jugadores. Son los futbolistas los que tienen que dar la cara por Zidane. 

Nadie mejor que Florentino Pérez sabe cómo se debe actuar ante este tipo de situaciones. El presidente, conocedor de la importancia del partido, no tomará ninguna decisión en caliente pase lo que pase en Turquía. El respeto y la admiración por Zidane obligaría a la directiva a tomar la decisión de otra manera. Zidane se ganó este crédito y, aunque ahora esté agotándolo, confían en él. Recuerden, el tiempo lo pone todo en su lugar.



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