Robben vuelve a entrenarse con el grupo
El holandés sigue quemando fases en su recuperación
Tras el día de descanso que Schuster concedió ayer a los suyos, el Real Madrid ha vuelto a los entrenamientos con muy buen talante tras las dos victorias consecutivas, pero con lo puesto de cara al encuentro del sábado ante el Getafe.
El técnico germano ha podido contar con catorce jugadores sobre el césped de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, entre los que se encontraban Alberto Bueno, Fabio Cannavaro, y Arjen Robben.
El delantero se ha integrado perfectamente en la dinámica de la primera plantilla, y tras haber debutado en Primera y en la Champions, todo parece indicar que Schuster va a contar con él regularmente para la línea de vanguadia del conjunto blanco. Por su parte, Robben ha vuelto a entrenar con el grupo con un aparatoso vendaje en su pierna derecha, pero totalmente integrado en los ejercicios propuestos. Al holandés le diagnosticaron seis semanas de baja tras lesionarse en el partido europeo ante la Juventus, pero el extremo sigue quemando etapas en su recuperación, y podría volver a los terrenos de juego antes de lo esperado.
Afortunadamente para Schuster, no sólo Robben ha mejorado de su lesión, sino que parece que Cannavaro estará listo para jugar en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe tras haberse ejercitado con total normalidad esta mañana. Así, después de la desafortunada lesión de Heinze, el alemán tendrá una opción más para componer la defensa.
El que parece que no podrá llegar finalmente es Gonzalo Higuaín, al que no se le ha visto por el verde de Valdebebas, y que sigue recuperándose del fuerte esguince de tobillo que sufrió ante el Recreativo. Mientras tanto, Drenthe, Casillas, Ramos, Sneijder, Gago y Pepe, todos titulares ante el BATE, se han ejercitado hoy en
MARCELO, OBJETO DE LAS BURLAS DE CANNAVARO
La nota curiosa de la mañana la han protagonizado Marcelo y Guti. El brasileño estrenaba unas innovadoras botas rosas, el mismo modelo que lleva Frank Ribery, mientras que el centrocampista merengue apareció por Valdebebas con la cabeza cubierta por un gorro que dejaba entrever una tirita en su ceja derecha, fruto del golpe que recibió el martes en Minsk.
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