¿Debería jugar Xabi Alonso 'sin pareja' en medio campo?

Alberto Piñero y Borja Fernández, cara a cara

El Real Madrid logró una histórica victoria en Riazor con un Benzema en modo pistolero y un Guti en plan 'simplemente Guti' pero, aparte de estos dos detalles, el conjunto de Manuel Pellegrini desplegó ese fútbol de toque y velocidad en la zona ancha con un medio campo formado por Xabi Alonso en la posición más retrasada, con Granero y Guti como escuderos con vocación ofensiva y Kaká como punto de unión con los delanteros. Por una herida-contusión en el talón, el centrocampista donostiarra no tuvo en la pista de baile a su habitual pareja Lass Diarrá, que probablemente ya esté listo para el partido ante el Espanyol. El conjunto funcionó entonces como pocas veces lo ha hecho, al gusto del entrenador chileno y para felicidad de Florentino Pérez. Pero entonces, ¿debería Pellegrini repetir esta exitosa fórmula y prescindir de ese omnipresente doble pivote tan frecuente en el fútbol actual en favor de Xabi Alonso? ¿O mejor seguir confiando en una pareja Alonso-Lass tan oscuramente productiva hasta la fecha?

 

                          Alberto Piñero

Lass es un jugador muy válido para el Madrid, pero tampoco hay que cegarse con esta moda del doble pivote, Borja. Hay que ser críticos para valorar que en algunos partidos no es necesaria esa dupla Xabi-Lass. El español también sabe robar además de crear, y quien haya visto los partidos esta temporada podrá corroborar lo difícil que es progresar a veces con dos jugadores pegados en la galleta central y un efectivo menos arriba. Por eso, quizá no en todos, pero ante el Espanyol y algún otro rival, creo que Xabi debería bastarse solo en el centro.

Borja Fernández

NO

No, no debería Pellegrini dejarse engañar por un triunfo vistoso aunque autocomplaciente,ante un equipo como el ex 'Súper Depor' que fue la sombra de sí mismo. El Madrid jugó bien en Riazor... durante 45 minutos. Después, la falta de consistencia en medio campo dejó al descubierto unas carencias defensivas, sobre todo en los laterales, que no sangraron esa noche porque no había un puñal enfrente que les buscara las cosquillas. Lass ha sido, y debe seguir siendo, el seguro de vida imprescindible para un equipo con una saludable vocación ofensiva.

 



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