Las verdades de José Mourinho

El entrenador del Real Madrid aplica siempre una dosis de realidad al fútbol

José Mourinho volvió a demostrar tras el partido entre el Real Madrid y el Getafe que es poco amigo de las hipocresías. El entrenador merengue supo reconocer el error de Clos Gómez que favoreció a los blancos con un penalti que en realidad se produjo fuera del área. Un gesto que le honra y que demuestra, una vez más, que el luso no tiene pelos en la lengua, sea para mal o para bien.

El entrenador del Real Madrid no tiene una doble vara de medir como existen en otros lares para enjuiciar lo que ve sobre el terreno de juego. El regreso de Clos Gómez al Bernabéu había despertado mucha expectación. El colegiado es recordado por el protagonismo que adquirió la pasada temporada tras la visita del Sevilla al Bernabéu.

Una visita en la que no estuvo nada afortunado, perjudicando claramente al Real Madrid y provocando el enfado del entrenador madridista. Hasta el punto de que Mou sacó a rueda de prensa un listado con los errores del árbitro en contra de su equipo, hasta trece. Una situación nunca vista antes y que elevó la polémica sobre los árbitros a su cota más alta.

Sin embargo, esta vez el aragonés repartió algo más los errores, otorgando una pena máxima a favor del Madrid tras una falta de Cata Díaz sobre Cristiano Ronaldo ligeramente fuera del área. Tras esta situación, hay quien dice que la presión de Mourinho comienza a surtir su efecto. Pero nada más lejos de la realidad, el luso jamás ha pedido que le den nada que no sea suyo. Sólo ha pedido igualdad para todos los equipos.

No es penalti, es falta clarísima”, señaló antes de expresar su opinión sobre Cristiano Ronaldo: “no es un piscinero como otros”. Y es que si Mourinho tiene una característica que le define por encima del resto es su sinceridad. Jamás verán al técnico madridista usar una doble vara de medir con respecto a las actuaciones arbitrales. Cuando se queja es con motivos, y cuando habla simplemente dice lo que piensa, lo que ha visto sobre el campo. Una actitud que cuadra perfectamente con el señorío de un club como el Real Madrid.



Reportajes DC