Los árbitros se ceban con Luka Modric
El mediocentro croata ha hecho apenas siete faltas, pero ya ha visto tres amarillas
Luka Modric aterrizó en el Santiago Bernabéu el pasado verano por expreso deseo de José Mourinho, que veía en él un reemplazo de lujo tanto para Mesut Özil en la mediapunta como para Xabi Alonso en el centro del campo. El entrenador portugués ya le ha dado en varias ocasiones los galones al croata para que dirija el cotarro, y éste no lo ha hecho nada mal. Sin embargo, hay un dato realmente preocupante en las apariciones del ex del Tottenham con el Madrid: la fijación arbitral hacia su persona.
El centrocampista del Real Madrid no es un jugador que destaque por su juego físico. No destaca ni por fuerza ni por potencia, sino por una técnica exquisita que el Bernabéu ya ha podido comprobar. Se dedica a la creación, no a la destrucción. De hecho, Modric apenas ha cometido siete faltas en los 509 minutos que ha disputado en Liga. Sin embargo, el estamento arbitral no tiene ninguna paciencia con él, y ya le ha mostrado tres amarillas hasta la fecha. Es decir, que el croata ha recibido una cartulina cada menos de dos partidos, o una cartulina por cada poco más de dos infracciones.
Modric fue amonestado por primera vez en el Real Madrid - Deportivo del Santiago Bernabéu. Más tarde, ante Mallorca y Zaragoza recibió sus otras dos cartulinas amarillas, que le dejan al borde de estar apercibido de sanción. Ante los gallegos, Ayza Gámez le enseñó la amarilla en la segunda mitad. Sin embargo, ni González González ni Estrada Fernández tuvieron miramientos con él y le mostraron la amarilla en la primera mitad, en el 24' y el 35' de juego respectivamente. ¿Por qué esa fijación por el medio madridista?
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