La renovación de Carvajal no peligra: firmará hasta 2024 a pesar de su 'annus horribilis'

El Real Madrid mantiene su deseo de renovar a Dani Carvajal, que ha tenido muy mala suerte con las lesiones esta temporada


Carvajal

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Las lesiones han sido una pesadilla esta temporada para el Real Madrid en general y para Dani Carvajal en particular. El equipo ha sufrido una auténtica plaga a lo largo del curso que Zidane ha mitigado como ha podido para llegar, con un mérito brutal, al tramo final de la temporada optando a dos títulos.

En el caso concreto de Dani Carvajal, el pepinero apenas ha podido disputar 15 partidos a lo largo de toda la temporada, una temporada muy extraña para él y en la que ha echado mucho en falta un periodo de preparación adecuado. No tener pretemporada ha sido decisivo para que el lateral, al igual que otros muchos compañeros, no haya logrado encontrar la continuidad deseada.

Ahora, le esperan tres semanas de baja otra vez que posiblemente supongan para él no volver a jugar en esta temporada. Solo en el caso de que el Real Madrid juegue la final de la Champions en Estambul podría tener alguna opción de volver a tener minutos, y muy forzado, tras apenas una semana de entrenamiento.

Del mismo modo, peligra su presencia en la próxima Eurocopa ya que Luis Enrique no las tiene todas consigo respecto a su convocatoria, según las últimas informaciones. Habrá que ver qué sucede. 

La renovación no es un problema

Sea como sea, lo que el Real Madrid tiene muy claro es que piensa renovar a Carvajal a pesar de todo. Tal y como te hemos contado en Defensa Central, el club blanco pretende ampliar el contrato del lateral sin mejorarle el sueldo, cobrando lo mismo que hasta la fecha, pero con una cláusula especial por bonus.

El Real Madrid no se va a echar atrás con esto a pesar de que Carvajal ha tenido sin lugar a dudas la peor temporada de su carrera. En el club blanco siguen creyendo que Dani, a su máximo nivel, es el mejor lateral derecho posible para el equipo.

Tiene que ir poco a poco para poder volver a sentirse futbolista, sin la presión de tener que estar disponible lo antes posible por las necesidades del equipo.