La Euroliga ha tomado una decisión, y ha abierto un procedimiento disciplinario contra el médico del Real Madrid. El comentario de este no fue oportuno, ni mucho menos acertado en ese momento. Su muestra de arrepentimiento se ha hecho notar, y no por ello merece ser castigado, cuando en el Palau Blaugrana se cometen faltas de respeto gravísimas hacia toda España.
En el pabellón del Barça, los aficionados sacaron una pancarta enorme en la que recalcaba que: “España es un Estado Fascista”. Mezclando la ideología con el baloncesto, metiendo asuntos que no tienen nada que ver. Frente a esto, la Euroliga también debe tomar las riendas y sancionar gravemente al club, por dejar que su afición muestre este tipo de cosas públicamente.
Con el Real Madrid se toman medidas, con el Barça no son nada exigentes. Podrían tener miedo al radicalismo del conjunto azulgrana, y por ello, dejan pasar el tema como si de algo leve se tratase. Si la justicia existiera, si la justicia actuara como es debido, el castigo se impondría para las dos partes, teniendo en cuenta que una cosa es una palabra en un momento concreto y lo otro es un gesto asqueroso permitido por el club, en este caso culé.
EuroLeague has opened a disciplinary procedure against Real Madrid's doctor
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— Eurohoops.net (@Eurohoopsnet) November 15, 2019
@EuroLeague para esto no hubo ningún tipo de problema pic.twitter.com/cnFE1eAuCx
— carlos navas (@kabezorro) November 15, 2019
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