Navarro no esconde su soberbia y ya piensa en conquistar su tercera Copa del Rey consecutiva antes de comenzar el torneo. "Es un reto ganar tres seguidas, porque nunca se ha hecho", resalta al tiempo que firma un clásico en la final. "No me gusta hablar de lo que no ha pasado, pero sería bonito", destaca.
El jugador tampoco escondió su ambición desmedida. "Llevo muchas Copas ya y el MVP se me sigue resistiendo. Somos el equipo a batir, todo el mundo se motiva más contra nosotros y será bonito ganar el torneo cerca de tus familiares", dijo. Más bonito sería para los madridistas hacerse con el torneo en el Palau Sant Jordi. Navarro no vendas la piel del oso antes de cazarlo.
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