5. Menos hablar de Ramos y más de Iniesta y Busquets
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Sergio Ramos se ha convertido en el protagonista negativo del Real Madrid en las últimas semanas. El central de Camas está pasando por un momento deportivo delicado y en el club blanco se ha generado alarma por sus nefastas actuaciones defensivas. Creen que el futbolista prioriza sus incursiones ofensivas en los partidos y que está descentrado atrás. Los datos que maneja Zidane son claros: Cuando juega Sergio Ramos, el equipo encaja casi el doble de goles y pierde la mayoría de puntos. El central andaluz salió cabizbajo del partido ante la UD Las Palmas tras una de sus actuaciones más lamentables de los últimos años. Regaló un penalti y falló estrepitosamente en el tercer gol de los canarios. No solo eso, Tana le hizo un traje a medida en varias jugadas en las que no midió bien por su ímpetu y su mala colocación. Buena parte del empate de Las Palmas fue mérito de su criticada actuación. Y no es algo nuevo. En las pasada jornada de Liga, Pepe le llamó la atención a Ramos y las cámaras de televisión captaron una fuerte discusión entre ambos en la que el portugués intentaba rectificar sus posiciones defensivas. Keylor Navas también le señaló ayer en reiteradas ocasiones y Zidane medita qué hacer sobre el asunto porque el Madrid encaja 1,57 goles por partido cuando juega como central, mientras que solo le marcan un 0,80 por ciento si Ramos no está en el campo. |
Respuesta del Infiltrado: Indudablemente, la prensa culé sabe disparar con bala. Tras estar varios meses escondida en su 'cueva' por el gran rendimiento que estaba teniendo el Madrid durante el inicio de temporada, ahora están intentando sacar partido del bache de resultados del equipo de Zidane. Así que no solo se han centrado en el irregular juego del equipo, sino que también han apuntado a algunos futbolistas claves para intentar enfrentarlos con sus compañeros y con el propio técnico merengue.
Por eso no han tardado en fijarse enSergio Ramos tras el empate del miércoles ante Las Palmas. En la prensa culé hablan de su pobre rendimiento en los últimos partidos y aseguran que el equipo encaja casi el doble de goles cuando el camero es titular que cuando no está sobre el terreno de juego. E incluso se atreven a hablar de "declive", como si el '4' madridista estuviera en la cuesta abajo de su carrera cuando está a punto de cumplir los 31 años de edad.
Y todo porque el Real Madrid encajó tres goles ante Las Palmas, llegando dos de ellos tras la expulsión de Gareth Bale. De hecho, uno fue por unas manos rigurosas de Ramos, pues el central puso los brazos pegados junto al pecho ante el disparo del atacante rival. Aunque, sea como fuere, el partido del miércoles no fue el mejor para sacar conclusiones, pues es hasta cierto punto normal que el equipo blanco presentara debilidades en defensa una vez que se quedó con un jugador menos sobre el campo.
Se trató, por tanto, de un ataque gratuito con el fin de dañar a Sergio Ramos y de enfrentarle a su técnico. Es totalmente falso que en el club haya alarma por su rendimiento reciente, porque no hay ningún motivo para la preocupación. Zidane nunca se ha planteado dejar al capitán en el banquillo y no lo hará más adelante. La confianza plena en el central es plena aunque sus últimas actuaciones no hayan sido perfectas, pues el cuerpo técnico asume que todo jugador tiene altibajos lógicos durante una temporada.
Y, ni mucho menos, es justo hablar de "declive" cuando resulta que en Barcelona tienen a dos jugadores que últimamente se arrastran por el campo como Busquets e Iniesta. La prensa culé haría bien en debatir las razones por las que estos dos jugadores han bajado llamativamente su rendimiento en los últimos meses - se podría decir que incluso temporadas - en lugar de hablar de los demás sin conocimiento de causa. Porque criticar a los demás sabiendo que se tiene la casa sin barrer es un comportamiento hipócrita y pobre.
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