Es imposible. Sobre él habrán escrito ya hasta en Chiquitistán del Norte. Y del Sur. ¿Cómo ser original con este futbolista? Imposible, y gratuito, hablar de su capacidad de liderazgo, de su vergüenza torera, de sus goles, de todo eso. Sólo se me ocurre una cosa y quizá tampoco sea yo la única que lo escribe: en nombre del periodismo nacional, tan atrotinado él, muchísimas gracias por llevar la bandera del Madrid hasta donde la has llevado, haciendo posible que se vendan periódicos, que la gente escuche la radio, vea la televisión, se enchufe a Internet. Es para darte una paga...
Gracias también en nombre del gremio de la hostelería, tan atrotinado él también (como todos los gremios, de momento) porque la de cervezas que se habrán vendido ayer y se venderán hoy entre un personal enloquecido con este final de Liga, discutiendo si esto va a acabar con el Madrid campeón, será una cantidad incalculable. Raúl y su espíritu, y naturalmente sus compañeros, están haciendo posible que una Liga que el Barça debió ganar en febrero esté como está. Sencillamente por su talante. Con Raúl y el Madrid habrá que tener siempre paciencia y respeto. Pues eso: que no hablo más para no repetirme. Simplemente insisto: gracias por echarnos esta mano amiga que nos estás echando. Hay Liga y hay interés porque tú existes. Y hasta el sábado.
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