El partido fue extraño, quizás fue uno de los partidos más ‘locos’ de esta Liga para el Madrid; el Rayo comenzó siendo muy superior, se sobrepuso al gol inicial de Danilo y en 2 minutos se pondría 1-2 levantando las iras de un Bernabéu que, por entonces, estaba muy soliviantado contra los suyos. Benítez se desesperaba pero el Madrid le daría la vuelta al duelo antes del descanso.
Tito se autoexpulsó de manera absurda y el partido comenzó a ser un paseo para los madridistas. Bale, con dos goles, y Cristiano Ronaldo ponían el 4-2 antes del descanso. Con 9 hombres, en el segundo acto, el Madrid no tuvo piedad y terminó metiendo seis goles más para cerrar el encuentro con un soberbio 10-2.
Paco Jémez rabiaba en rueda de prensa por una supuesta humillación, pero todo fue una ‘rabieta’ sin sentido ante la superioridad manifiesta del Real Madrid. El madridismo recuerda aquella tarde y espera repetirla en poco tiempo. Meter 10 goles no se hace todos los días. En Vallecas, el Madrid quiere tres nuevos puntos ligueros.
DEJA TU COMENTARIO